El exmandatario y actual precandidato republicano, Donald Trump, ha hecho una promesa audaz durante su campaña electoral. En un mitin en el estado clave de Wisconsin, Trump afirmó que llevará a cabo la «mayor deportación» de migrantes en la historia de Estados Unidos si regresa a la Casa Blanca después de las elecciones del 5 de noviembre. Según él, permitir la entrada de millones de personas por la frontera sur, muchas de las cuales son «muy malas», no es sostenible y acabará destruyendo el país.
Trump ha criticado repetidamente a su rival demócrata, el presidente Joe Biden, por su política de fronteras abiertas, alegando que ha provocado una «invasión» de migrantes durante los últimos cuatro años. En una reciente entrevista con la revista Time, el exmandatario incluso mencionó su intención de utilizar al Ejército para perseguir y detener a migrantes indocumentados en caso de ganar las elecciones. Aunque no descartó la construcción de nuevos campos de detención, Trump enfatizó que su enfoque principal sería deportar a los migrantes de manera rápida.
La migración se ha convertido en uno de los temas más importantes en la campaña electoral de Trump, quien en 2016 prometió construir un muro en la frontera con México. Aprovechando una pausa en su juicio penal en Nueva York, el magnate neoyorquino ha centrado sus esfuerzos de campaña en los estados de Wisconsin y Míchigan, donde las encuestas muestran un empate virtual con Biden.
La Administración de Biden ha revertido muchas de las políticas migratorias implementadas por Trump. Han anulado la política de devoluciones rápidas de migrantes y han implementado programas de permisos humanitarios para personas de varios países, al tiempo que han restringido las solicitudes de asilo en la frontera. A pesar de estos cambios, más de dos millones de personas fueron arrestadas el año pasado al intentar cruzar la frontera sur de Estados Unidos de manera irregular.
La postura de Trump sobre la migración sigue siendo un tema polémico y divisivo en el país. Mientras algunos apoyan sus medidas más estrictas, otros critican su enfoque y abogan por una política migratoria más compasiva. Con las elecciones a la vuelta de la esquina, está por verse cómo este tema impactará en el resultado final.