La reanudación de los vuelos de deportación de migrantes de Venezuela anunciada por Estados Unidos la semana pasada no ha tenido ningún impacto en el flujo migratorio a través de la selva panameña del Darién, donde más de 424.000 personas han cruzado este año, siendo el 63,9% de ellos venezolanos, según afirmó María Isabel Saravia, subdirectora del Servicio Nacional de Migración de Panamá.
A pesar de las medidas de deportación anunciadas por Estados Unidos, el paso de migrantes a través de la selva no ha disminuido. Los Gobiernos de Estados Unidos y Venezuela llegaron a un acuerdo para deportar a migrantes venezolanos, una práctica que no se llevaba a cabo debido a la falta de relaciones diplomáticas entre ambos países desde 2019.
Las estadísticas proporcionadas por el Servicio Nacional de Migración indican que desde enero hasta la fecha, 424.661 personas han cruzado el Darién, una cifra sin precedentes, de las cuales 271.481 son venezolanos. Muchos de estos migrantes son familias enteras que han estado fuera de Venezuela durante varios años y han comenzado su travesía hacia Estados Unidos desde otros países.
Saravia afirmó que esta migración masiva e irregular es un drama humano que requiere una respuesta basada en la corresponsabilidad de los países de origen, tránsito, destino e incluso de los países de retorno. Aunque la mayoría de las personas en movimiento son venezolanas, en años anteriores eran haitianos o cubanos. Los registros de Panamá muestran que personas de más de 60 países atraviesan la selva en su viaje irregular hacia Norteamérica, con más del 95% dirigiéndose a Estados Unidos.
El Tapón del Darién es un parque nacional de 579.000 hectáreas que ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad desde 1981. Sirve como una conexión entre Centroamérica y el sur del continente y es la frontera natural entre Panamá y Colombia. A pesar de los peligros que implica, tanto por su entorno salvaje como por la presencia de criminales, sigue siendo utilizado por miles de migrantes, muchos de ellos impulsados por redes de tráfico de personas.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció que se llevará a cabo una cumbre sobre migración el próximo 22 de octubre, en la que participarán mandatarios de 11 países latinoamericanos, incluido Panamá. López Obrador estima que hasta 6.000 migrantes llegan diariamente a la frontera de México con Centroamérica (Guatemala y Belice), mientras que hasta 10.000 llegan a la frontera con Estados Unidos.