El informe publicado por el Banco Central de Venezuela revela que la inflación en febrero fue del 1,2%, lo cual representa una disminución respecto al 1,5% registrado en enero y la cifra mensual más baja desde marzo de 2022, cuando el Índice Nacional de Precios al Consumidor aumentó un 1,4%.
El último registro de una cifra similar a la de febrero se remonta a agosto de 2012, cuando el INPC subió un 1,1%. Durante los dos primeros meses de 2024, la variación acumulada del índice alcanzó el 2,94%. En términos anualizados, el crecimiento se sitúa en un 75,91%, una disminución que coincide con las proyecciones de economistas y consultoras.
En comparación con la variación anualizada del INPC de febrero de 2023, que fue del 415,6%, el incremento en los últimos 12 meses ha sido inferior en 339,62 puntos porcentuales, lo que representa una desaceleración significativa. Además, el aumento del 75,91% constituye el menor incremento anualizado de la inflación en Venezuela en una década, ya que en 2014 la inflación anual cerró en un 68,5%.
El análisis de las variaciones mensuales de la inflación por sectores muestra que los mayores incrementos se registraron en bienes y servicios diversos (2,1%) y esparcimiento y cultura (2%). Comunicaciones, que había sido el sector con mayores aumentos en los últimos años, cerró febrero con un incremento mensual del 1,3%, un 64,86% inferior al reportado en enero.
Los sectores con menor alza mensual fueron servicios de vivienda excepto teléfono (0,2%), servicios de educación (0,8%) y alimentos y bebidas no alcohólicas (0,9%). Por otro lado, equipamiento del hogar tuvo uno de los mayores aumentos con un 1,7%, mientras que salud y bebidas alcohólicas y tabaco aumentaron un 1,1%. El alquiler de viviendas también se aceleró, pasando del mínimo del 0,9% en enero al 1,4% en febrero.
Transporte y restaurantes y hoteles registraron un aumento en la misma proporción, un 1,3%, mientras que vestido y calzado aumentó modestamente un 1,2%.