Un conocido “youtuber” italiano Matteo Di Pietro llegó hoy a un acuerdo para ser condenado a cuatro años y cuatro meses de prisión por el homicidio de Manuel Proietti, un niño de cinco años en un accidente automovilístico provocado durante la grabación de un desafío para las redes sociales.
En junio de 2023, el joven, de 20 años, y que hacía vídeos para el canal ‘Theborderline’ que publica retos en las redes, conducía un Lamborghini por las calles de Roma para lograr superar el reto de permanecer ininterrumpidamente al volante del vehículo durante 50 horas cuando se estrelló contra el coche de una familia en el que viajaban también la madre del fallecido, Elena Uccello, y la hermana de tres años, heridas de gravedad por la colisión.
Di Pietro viajaba acompañado de otros cuatro jóvenes conocidos en las redes sociales por grabar videos a bordo de sus coches de lujo para un grupo de YouTube, que cuenta con 600.000 suscriptores y más de 152 millones de visualizaciones desde el año 2020.
El joven pactó la pena por los delitos de homicidio por accidente de tráfico agravado por negligencia, imprudencia e incompetencia” e “incumplimiento de las normas de circulación”.
Ante el juez de la audiencia preliminar, Matteo Di Pietro expresó sus disculpas y su dolor y reconoció nuevamente su responsabilidad, como ya lo había hecho en el interrogatorio y también expresó su deseo de participar en futuros proyectos relacionados con la seguridad vial.
La pena, como explicó el abogado, permitirá que el joven no vaya a prisión y calificó la sentencia “acorde con los objetivos de nuestro sistema, de reeducación, de resocialización propios de las sanciones penales”.
El ministro de Transportes italiano, Matteo Salvini, criticó la sentencia en las redes sociales y afirmó que “es necesaria una reforma de la Justicia”.
“Se reían y filmaban los autos destrozados”
Un testigo de la tragedia que acabó con la vida del pequeño de cinco años relató las escenas de horror que tuvieron lugar el miércoles por la tarde en Roma.
“Se reían, sin freno. Se reían y filmaban los coches destrozados”, afirmó Alessandro Milano, padre de una compañera de colegio de Manuel Proietti, según el medio italiano Corriere della Sera.
Hasta una hora antes de la tragedia, Alessandro Milano se encontraba con su familia y la de Manuel celebrando el fin del año escolar.
“En un momento estaba en la mesa viendo comer a Manuel, y poco después vi el coche de su madre destrozado. La mayor vergüenza es que el miércoles el chico que conducía el todoterreno estuvo aquí, en el lugar del accidente, durante cuatro horas y no derramó ni una lágrima. No vi a nadie desesperado, ni a él ni a sus amigos: todos estaban serenos, incluso vertiginosos. Pensaban en los seguidores. Tuvieron una reacción realmente pésima: sonreían, empezaron a hacer vídeos. Cuando otro padre vio lo que estaban haciendo, señaló que había un niño muriéndose en el hospital. Ni siquiera entonces reaccionaron, y fue entonces cuando empezó la parafernalia. Sólo al final el padre fue denunciado incluso por agresión”, relató Alessandro, según Corriere della Sera.