El representante de la Asociación Civil Convite, Luis Francisco Cabezas, indicó que las aseguradoras tienen prácticas restrictivas en contra de los adultos mayores, donde «prácticamente no les quieren cubrir nada»
El director general de la Asociación Civil Convite, Luis Francisco Cabezas, aseguró este jueves que los adultos mayores del país reciben los salarios más bajos de América Latina, lo que coloca a Venezuela como la peor nación para envejecer.
Durante una entrevista en Unión Radio, el representante de la ONG se refirió al conjunto de indicadores de calidad de vida de la Organización Mundial de la Salud, que datan desde 2016.
“El marcador no es reciente”, dijo el activista. “De una muestra de 79 países, solo nos superaba Honduras en Centro América, pero en el continente latinoamericano, apuntábamos como el peor”, apuntó.
Asimismo, indicó que el Banco Mundial establece que para vivir por encima de la línea de pobreza, se necesitan mínimo 1,90 dólares diarios y en la actualidad, un adulto mayor venezolano gana menos de 0,83 centavos de dólares al día.
“¿Cómo hace un adulto mayor para vivir con 25 dólares al mes? Eso es menos de 0,83 centavos de dólares diarios. Los adultos mayores pensionados reciben menos de lo recomendado por el Banco Mundial”, enfatizó.
Acceso a medicinas
Cabezas aseguró que la población de adultos mayores tiene difícil acceso a las medicinas porque no es posible destinar el 40% del total de la pensión, a remedios, cuando deben priorizar la alimentación.
“Si lo que perciben son 25 dólares al mes, y una caja de Losartan cuesta siete, ¿Cómo hacen para destinar prácticamente el 40% de lo que te dan para vivir, a una caja de pastillas que solo trae 28 comprimidos? Ni siquiera alcanza para todo el mes”, añadió el director de Convite.
De la misma manera, aseguró que la posibilidad de que un adulto pueda acceder a una póliza de HCM privada se restringe al uno por ciento de la totalidad de la población de adultos mayores.
“A ello hay que sumarle que las propias aseguradoras tienen unas prácticas muy restrictivas hacia los adultos mayores, en las que prácticamente no les quieren cubrir nada. Ahí vemos, por un lado, el sistema de salud público desmantelado y por el otro, la salud privada, inaccesible” sentenció.