El gobierno de Ecuador ha admitido que enfrenta dificultades en la organización de la votación presencial para la segunda vuelta de las elecciones presidenciales en países como Venezuela, Nicaragua y Rusia, según lo ordenado por el Consejo Nacional Electoral (CNE).
El ministro de Relaciones Exteriores de Ecuador, Gustavo Manrique, y el ministro de Gobierno, Henry Cucalón, explicaron en una rueda de prensa que las principales dificultades son el envío de fondos a las misiones diplomáticas y el alquiler de locales para la votación.
A pesar de estas dificultades, el gobierno está redoblando sus esfuerzos para organizar la logística de las elecciones generales en el exterior en solo un mes, lo cual normalmente toma seis meses de planificación y ejecución.
Para este proceso electoral, se asignaron 1.9 millones de dólares para 101 zonas electorales, de las cuales 59 requieren el alquiler de locales externos. La Cancillería ha sugerido al CNE que las votaciones en países con husos horarios de 12 o 14 horas de diferencia con Ecuador comiencen en días anteriores a la fecha establecida en el territorio ecuatoriano.
El gobierno tiene un firme compromiso de contribuir a que las elecciones sean libres y transparentes. El CNE decidió que la votación en el exterior para la segunda vuelta se realice de manera presencial después de los problemas con la plataforma informática del voto telemático en la primera vuelta.
El ente electoral denunció ciberataques de siete países durante ese día, lo que impidió que la mayoría de los registrados pudieran votar. Aunque los comicios para la Asamblea se repitieron el 15 de octubre, el CNE no consideró necesario repetir la primera vuelta presidencial en el exterior, ya que no sería determinante para cambiar el resultado que llevó a la segunda vuelta a Luisa González y Daniel Noboa.