El avance de la tecnología ha dejado una profunda huella en diversos aspectos de la sociedad, desde la medicina hasta la política. La inteligencia artificial (IA) no es una excepción y ha comenzado a abrir insospechadas puertas, generando debates en ámbitos tan inesperados como la religión.
Con información de Telemundo Chicago
El impacto creciente de la inteligencia artificial abarca diversos sectores, suscitando tanto optimismo como cautela. En este contexto, la Iglesia Católica se posiciona de manera particular, y los feligreses expresan opiniones diversas sobre cómo la fe se entrelaza con esta nueva tecnología.
En los primeros pasos de la inteligencia artificial, Francisco, un informático católico, vislumbra beneficios significativos para la Iglesia. Afirma que la IA podría brindar acceso a conocimientos eclesiásticos que, de otra manera, podrían resultar inaccesibles o difíciles de encontrar para los fieles.
La fusión de la fe y la inteligencia artificial, aunque sorprendente, ya muestra signos de desarrollo. Otros feligreses, como Escudero, destacan casos de uso en la preparación de homilías y discursos, donde la IA demuestra ser una herramienta valiosa para guiar y transmitir mensajes de manera efectiva.
El Padre Michael Enright, líder de la Iglesia Saint Paul en Pilsen, comparte cómo su parroquia ha adoptado la tecnología para propósitos benevolentes, desde el registro de asistentes hasta la proyección de películas.
El tema ha alcanzado tal relevancia que el Papa Francisco se ha pronunciado al respecto, anunciando que la inteligencia artificial será el tema principal a discutir en la próxima jornada mundial de la paz. En un comunicado del Vaticano emitido en agosto pasado, el Papa hizo un llamado a abordar de manera responsable el concepto y el uso de la inteligencia artificial, enfocándose en su servicio a la humanidad y la protección del medio ambiente.
Sin embargo, también se expresan preocupaciones sobre los riesgos asociados con la inteligencia artificial. Se destaca la capacidad de la IA para difundir noticias falsas, planteando desafíos éticos y la necesidad de una reflexión cuidadosa sobre su implementación.
El padre Michael advierte sobre posibles desventajas, especialmente entre los jóvenes o aquellos menos familiarizados con un mundo sin tecnología. Se hace un llamado a la cautela y a cuestionar el impacto de la IA, reconociendo que, aunque puede aportar beneficios, también plantea desafíos éticos.
Frente al temor de que la inteligencia artificial pueda convertirse en una «dictadura tecnológica», la Santa Sede promueve la ética en su uso. La iniciativa «Llamamiento de Roma por la ética de IA» ha sido respaldada por empresas como IBM y Microsoft, así como por representantes de judaísmo e Islam, evidenciando un esfuerzo conjunto para abordar los desafíos éticos planteados por el avance de la inteligencia artificial