El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha anunciado su intención de implementar una prohibición gradual de la venta de cigarrillos, con el objetivo de convertir al Reino Unido en un país libre de tabaco. En su discurso en el congreso de su partido en Mánchester, Sunak propuso aumentar la edad legal para fumar en un año cada año, lo que significa que los jóvenes de 14 años en la actualidad nunca podrán comprar cigarrillos legalmente. Esta medida busca combatir el tabaquismo, que es la principal causa de mortalidad evitable en el país y está relacionado con uno de cada cuatro fallecimientos por cáncer.
El gobierno británico estima que el tabaquismo genera un costo anual de 17.000 millones de libras esterlinas (unos 20.500 millones de dólares) para el sistema de salud. Sin embargo, Downing Street ha aclarado que el tabaquismo no será criminalizado y que aquellos que actualmente pueden comprar cigarrillos legalmente no tendrán impedimentos para hacerlo en el futuro.
En otro tema, el proyecto del tren de alta velocidad HS2, que tenía como objetivo unir Londres con las ciudades del norte de Inglaterra, ha sufrido cambios significativos. En lugar de llegar hasta Manchester, como estaba previsto inicialmente, el trazado de alta velocidad terminará en Birmingham y los trenes continuarán hacia el norte a través de vías convencionales. El costo del proyecto ha aumentado considerablemente, estimándose ahora entre 71.000 y 98.000 millones de libras (entre 86.000 y 120.000 millones de dólares).
El HS2, que fue concebido hace más de una década, tenía como objetivo estar operativo en 2026, pero se espera que el primer tramo hasta Birmingham se retrase hasta 2033. Además, cuando se abra el primer tramo de vías, los trenes no llegarán a la estación de Euston en Londres, sino que terminarán en Old Oak Common, en los suburbios al oeste de la ciudad.
La cancelación del ramal hacia Manchester ha generado críticas tanto de los conservadores como de los laboristas del norte de Inglaterra. El alcalde de West Midlands ha calificado la decisión de Sunak como una «metedura de pata política» y el alcalde de Manchester ha expresado su preocupación de que el Reino Unido ya no pueda llevar a cabo proyectos grandes y complicados. El alcalde de Manchester ha pedido al gobierno que priorice la construcción de la línea entre Manchester y Birmingham, con la esperanza de completar el ramal hasta Londres en el futuro.