Estambul, (EFE).- ¿Alguna vez te has preguntado de dónde viene el término «Wi-Fi»? La mayoría asumiría que es una abreviatura técnica para describir la tecnología que permite la conexión a Internet de forma inalámbrica. Sin embargo, estarían equivocados.
Contrario a la creencia popular, ‘Wi-Fi’ no es una abreviatura de «fidelidad inalámbrica». En realidad, es un juego de palabras con ‘Hi-Fi’, acuñado en la década de 1950 por fabricantes de equipos de audio como una abreviatura de «alta fidelidad». Sin embargo, no existe tal cosa como fidelidad inalámbrica. Es simplemente un nombre elegante inventado por expertos en marketing.
La idea de que ‘Wi-Fi’ significa «fidelidad inalámbrica» ha estado circulando en Internet desde al menos 2005, cuando Cory Doctorow de Boing Boing desacreditó ese mito. En realidad, el término fue creado por la firma de marketing Interbrand, que también ideó marcas como el antidepresivo Prozac y la empresa informática Compaq.
El término técnico para la tecnología era IEEE 802.11, pero eso no era memorable. Necesitaba ser algo universal, fácilmente reconocible en cualquier lugar. Así nació ‘Wi-Fi’, jugando con el término ‘Hi-Fi’, con el que todos estaban familiarizados a finales de los años 90.
Aunque el nombre en sí no tiene un significado técnico, fue increíblemente exitoso al comunicar la idea de conexión a Internet inalámbrica. Desde su lanzamiento, ‘Wi-Fi’ se ha convertido en sinónimo de accesibilidad inalámbrica en cualquier lugar y ha sido adoptado globalmente como la forma común de solicitar conexión a Internet sin cables.