El Gobierno de Estados Unidos ha anunciado que comenzará a aceptar peticiones de asilo de ciudadanos de Cuba, Haití, Nicaragua y Venezuela que ya se encuentren en territorio mexicano, en un esfuerzo por descongestionar la frontera del lado mexicano. Este acuerdo llega tras una reunión entre una delegación estadounidense y el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Con información de EFE
Como parte de este acuerdo, el Gobierno de México se ha comprometido a crear un «espacio internacional multipropósito» en el sur del país para ofrecer nuevas opciones de asilo y empleo a las personas más vulnerables que se encuentran en la región.
El programa tiene como objetivo aliviar la presión migratoria que el Gobierno mexicano ha enfrentado en los últimos años. Para solicitar asilo en Estados Unidos, los solicitantes deben demostrar que enfrentan persecución debido a su raza, religión, nacionalidad, opinión política o pertenencia a un grupo social o étnico específico.
Actualmente, la principal vía para solicitar asilo en EE. UU. es a través de la aplicación móvil «CBP One», que solo ofrece 1.250 citas diarias y se llenan rápidamente debido a la alta demanda. Además, otro programa permite a los nacionales de los cuatro países mencionados solicitar un permiso migratorio para entrar a Estados Unidos, pero está limitado a 30.000 personas al mes.
Con esta medida, el Gobierno de Biden busca fomentar la migración legal y facilitar el proceso de asilo para quienes ya se encuentran en México, al tiempo que alivia la presión en la frontera y garantiza una mayor seguridad en la solicitud de asilo.