El presidente de la Federación de Jubilados y Pensionados, Emilio Lozada, expresó su indignación por el ajuste del ingreso integral mensual a través de bonificaciones, calificándolo como una nueva burla por parte del gobierno de Nicolás Maduro. En una entrevista con MundoUR, Lozada destacó la falta de respuesta del gobierno a la propuesta de las centrales sindicales de un ajuste a 200 dólares para mejorar los ingresos de los jubilados y pensionados.
Según Lozada, se presentó al presidente un documento que certifica la viabilidad de los 200 dólares como un aporte inicial para reconstruir el salario que se ha vuelto insignificante. Este documento fue elaborado por economistas consultados con el objetivo de mejorar los ingresos mensuales de los cerca de 10 millones de trabajadores jubilados y activos.
A pesar de no anunciar un aumento del salario mínimo ni de las pensiones, Nicolás Maduro informó sobre un ajuste del ingreso mensual a 130 dólares, mediante el aumento del Bono Contra la Guerra Económica a 90 dólares y el cestaticket a 40 dólares. Mientras tanto, el gobierno planea lanzar una nueva misión para atender a los adultos mayores y una propuesta de ley que obligaría a los empresarios privados a hacer un aporte especial destinado a las pensiones.
El economista Luis Oliveros considera que un aumento a 200 dólares del salario y la pensión sí es viable, aunque esto afectaría el presupuesto en un momento en que la situación fiscal es precaria. Oliveros señala que Venezuela tiene un problema de generación de ingresos más que de gasto público y que la producción petrolera normalizada podría cambiar la situación.
Además, Oliveros destaca el desbalance en la recaudación de impuestos por parte de las empresas y sugiere que el Estado debería tener ingresos por otras vías para no cargar tanto a las empresas. En su opinión, el ajuste es demasiado fuerte y el peso recae en las empresas.
En resumen, la indignación de los jubilados y pensionados ante el ajuste del ingreso integral mensual refleja la precaria situación económica en Venezuela. Aunque se ha propuesto un aumento a 200 dólares, la viabilidad y el impacto en el presupuesto siguen siendo temas de debate.