Las dictaduras electorales en el siglo XXI en América son un fenómeno preocupante. Países como Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua manipulan las elecciones a través de fraudes y sin garantizar la libertad del pueblo para mantener una falsa imagen de respaldo popular. Esto constituye una violación flagrante de los derechos humanos y demuestra una metodología uniforme de falsificación del registro de votantes y el control de jueces y autoridades electorales.
Una dictadura electoralista se caracteriza por concentrar el poder en una persona o grupo, reprimir los derechos humanos y las libertades individuales, y manipular las elecciones de manera que el pueblo vote, pero no elija realmente. Esto va en contra de los principios establecidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, que establece que la voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder público y que esta voluntad debe expresarse a través de elecciones auténticas y periódicas.
La Convención Americana sobre Derechos Humanos, también conocida como el Pacto de San José, establece que todos los ciudadanos deben tener el derecho de participar en la dirección de los asuntos públicos, votar y ser elegidos en elecciones auténticas realizadas por sufragio universal e igual y por voto secreto. Estos derechos políticos son fundamentales para la democracia.
La Carta Democrática Interamericana también enfatiza la importancia de celebrar elecciones periódicas, libres, justas y basadas en el sufragio universal y secreto como expresión de la soberanía del pueblo. Estas elecciones deben llevarse a cabo en el marco del respeto a los derechos humanos y las libertades fundamentales, el acceso al poder y su ejercicio de acuerdo con el estado de derecho, el régimen plural de partidos políticos y la separación e independencia de los poderes públicos.
Las dictaduras electorales violan estos derechos a través de una serie de delitos que implican el control total del poder. Manipulan y alteran el registro de votantes de manera cuantitativa y demográfica, con la complicidad de funcionarios, jueces y autoridades electorales que certifican registros falsos, inhabilitan candidatos y certifican resultados adulterados en beneficio de la dictadura.
Cuba, como jefe del sistema dictatorial del socialismo del siglo XXI, obliga a la gente a votar en un sistema de partido único para mantener su narrativa de respaldo popular. Sin embargo, esto se logra mediante el terrorismo de estado y la complicidad de líderes democráticos que no cumplen con sus obligaciones internacionales.
Venezuela también ha aplicado este sistema de manera sostenida, incluso cometiendo crímenes de lesa humanidad. El régimen venezolano ha intentado alterar y sabotear las elecciones internas de la oposición para evitar que un candidato opositor real derrote al dictador.
En Nicaragua, el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo ha cometido crímenes flagrantes en las elecciones generales de 2021 y las municipales de 2022. Han encarcelado a todos los candidatos de la oposición real, han judicializado la persecución política, han cometido torturas, extorsiones y falsificaciones, y han expatriado a presos políticos para luego seguir deteniendo y torturando.
En Bolivia, las elecciones generales de 2020 presentaron a Luis Arce como ganador por mayoría absoluta, pero esto fue parte de un sistema aplicado con la complicidad de la presidenta interina, su gobierno y la oposición funcional. Mantuvieron un padrón electoral adulterado, acomodaron funcionarios que no denunciaron la inexistencia de sufragio universal y devolvieron el poder ejecutivo a la dictadura a través del sistema judicial.
Es importante reconocer y denunciar estas dictaduras electorales en América para proteger los derechos humanos y promover la democracia en la región.
una elección sistematizada, como en venezuela le garantiza al régimen. el triunfo y en este momento es mas favorable, por la cantidad de venezolanos que están fuera del país, que no pueden sufragar. el fraude se produce, con el documento de identidad, que tiene doble numeración la natural, que identifica al dueño de la cédula y la virtual en la parte posterior, en mi caso el # asociado a mi ci:12.257.393 este número al registrarlo en el cne vota en el estado zulia. si la persona del número natural no vota serán dos votos para el régimen el número natural más el asociado.¿ cuantos documentos asociados existen? en mi familia somos cuatro (tres) tienen números asociados. por eso es necesario exigir elecciones manuales. para bloquear el caballo de tro en las elecciones.
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