El Consejo de la Unión Europea (UE) anunció el lunes que ha decidido renovar las sanciones impuestas al gobierno de Nicolás Maduro, pero con la particularidad de que ahora serán revisadas cada seis meses en lugar de cada año. Esta medida ha sido recibida con rechazo por parte del gobierno de izquierda, el cual ha calificado las sanciones como «ilegales».
En un comunicado emitido, el Consejo informó que «decidió de manera excepcional extender las medidas restrictivas por un período de seis meses, en lugar de un año, hasta el 14 de mayo de 2024».
La resolución emitida por el Consejo fue rechazada de inmediato por el gobierno de Maduro, quien acusó a la UE de actuar de manera «arrogante e ilegal». Además, señaló que esta decisión «les impide participar en los procesos políticos de Venezuela».
La Cancillería venezolana emitió un comunicado en el que expresaba que la UE «una vez más refleja su política de injerencia en los asuntos internos de la República Bolivariana de Venezuela, aplicando medidas degradantes, dañinas e injustas».
Las sanciones impuestas por la UE contra Venezuela se remontan al año 2017 y fueron establecidas debido al deterioro de la democracia, el Estado de derecho y los derechos humanos en el país.
Cabe destacar que el gobierno y la oposición venezolana llegaron a un acuerdo el pasado mes de octubre para la celebración de elecciones presidenciales en 2024, las cuales contarán con la presencia de observadores internacionales, entre ellos representantes de la UE.
En el comunicado emitido por el Consejo, se aplaudió este acuerdo y se afirmó que representa un paso positivo hacia la restauración de la democracia en el país.
En este contexto, la decisión de extender las sanciones por un semestre en lugar de un año se tomó como parte de la revisión anual de las medidas restrictivas.
El Consejo de la UE dejó claro que está dispuesto a tomar medidas y considerar la flexibilización o revocación de las sanciones en función de la evolución de la situación y la implementación de este acuerdo político.
Según el acuerdo alcanzado entre el gobierno y la oposición venezolana, las elecciones presidenciales se llevarán a cabo en el segundo semestre de 2024, siguiendo el cronograma constitucional establecido.
Las sanciones impuestas por la UE contra Venezuela incluyen un embargo de armas y equipos de represión, así como la prohibición de visados para 54 ciudadanos y la congelación de posibles activos que posean en Europa.