En enero de 2011, durante un discurso, María Corina Machado, entonces diputada de 44 años, interpeló al presidente Hugo Chávez, quien le respondió: «Yo le sugiero que gane las primarias». En ese momento, Chávez la menospreció al añadir: «Está fuera de ranking para discutir conmigo (…) Águilas no cazan moscas».
Con información de BBC Mundo
Doce años después de esta famosa confrontación, Machado se convirtió en la líder del movimiento opositor al chavismo al ganar las primarias con un amplio margen. Los primeros resultados indicaban que obtuvo el 93% de los votos con un cuarto de las actas escrutadas.
Estas primarias de la oposición, en las que participaron decenas de miles de venezolanos radicados en el extranjero, representaron un hito, ya que por años estuvieron excluidos del proceso electoral. La participación fue mayor de lo esperado, alcanzando cerca de un millón y medio de personas.
A pesar de los obstáculos y la falta de apoyo estatal, los organizadores consideraron estos comicios un «éxito» que demostró la vitalidad del electorado opositor y la voluntad de los venezolanos de participar en un proceso democrático.
Sin embargo, surgen preguntas sobre lo que viene a continuación. María Corina Machado está inhabilitada para ejercer cargos públicos, la unidad de la oposición es frágil y la voluntad del gobierno de Nicolás Maduro, así como la posición de las Fuerzas Armadas, sigue siendo una variable clave en la política venezolana.
Estas primarias son especialmente significativas, ya que las negociaciones entre la oposición y el chavismo lograron la liberación de cinco políticos presos y establecieron un calendario electoral para las elecciones presidenciales de 2024. Esto se hizo a cambio de levantar ciertas sanciones financieras que afectaban al gobierno.
La victoria de María Corina Machado es solo el primer paso en un proceso político venezolano que promete ser complicado y desafiante. La líder opositora, apodada «la dama de hierro», ha mantenido una postura firme a lo largo de los años y ha construido una base de apoyo.
A pesar de su inhabilitación, su victoria en las primarias le otorga un importante capital político para influenciar la estrategia de la oposición. El futuro de Venezuela está en juego, y las decisiones que se tomen en los próximos meses tendrán un impacto significativo en la situación del país.
El liderazgo de María Corina Machado promete generar debates y desafíos en un escenario político altamente volátil. La comunidad internacional, incluida la Casa Blanca, estará atenta a los acontecimientos en Venezuela y al papel que desempeñará Machado como líder de la oposición.