Nicolás Maduro, ha realizado acusaciones contundentes contra la Corte Penal Internacional (CPI) y la Corte Internacional de Justicia (CIJ), a quienes considera «cómplices indirectos del genocidio» en Gaza, responsabilizando a Israel por la ofensiva en el enclave que ha dejado más de 30.000 muertos.
Durante su programa semanal de televisión, Maduro afirmó que Venezuela no acepta el «colonialismo judicial» y criticó a la CIJ y a la CPI por no pronunciarse sobre la guerra en Gaza, a la que describió como «un genocidio transmitido en vivo por las redes sociales, un exterminio del pueblo palestino».
Además, el presidente venezolano cuestionó la falta de acción de estos organismos internacionales de justicia y afirmó que la CIJ está en manos del «imperio de occidente», conformado por Estados Unidos, Europa y empresas transnacionales.
Maduro insistió en que la CIJ ha quedado en el suelo debido a su silencio frente a un genocidio en pleno desarrollo, calificándolo de «silencio criminal».
Cabe destacar que la CIJ está llevando a cabo un proceso para resolver la controversia territorial entre Venezuela y Guyana, aunque el gobierno venezolano rechaza la jurisdicción del tribunal en este asunto.
Por otro lado, la CPI aprobó la semana pasada reanudar la investigación sobre presuntos crímenes de lesa humanidad en Venezuela, a pesar de las afirmaciones del gobierno de Maduro de que estos hechos nunca han ocurrido.