Tres madres venezolanas, que también son víctimas de maltrato y persecución política, se encuentran en una situación de salud delicada y necesitan ayuda urgente. La organización «Justicia, Encuentro y Perdón» ha compartido esta información, destacando que Yusleida Pérez, Emirlendris Benítez y Edircia Fuenmayor están expuestas a altos niveles de riesgo.
Yusleida Pérez es madre de Roberto Catalino Romero Pérez, un sargento segundo de la Guardia Nacional Bolivariana que fue detenido el 21 de enero de 2019 por su presunta participación en el levantamiento en Cotiza. Fue condenado a 7 años y 9 meses de prisión. Pérez será operada el próximo 1 de diciembre debido a un diagnóstico médico muy delicado, según ha señalado la ONG.
Por su parte, Emirlendris Benítez ha sido sentenciada a una pena máxima de 30 años de prisión por su supuesta participación en el intento de magnicidio contra Nicolás Maduro. La organización afirma que necesita una medida humanitaria que le permita ser operada y evitar así la pérdida definitiva de su capacidad para caminar.
Finalmente, Edircia Fuenmayor, madre del teniente de fragata Ángel Barrios, condenado a 10 años de prisión por su supuesta participación en una rebelión militar contra la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, necesita someterse a una meniscectomía parcial artroscópica.
La organización destaca que ninguna de estas mujeres cuenta con los recursos económicos necesarios para costear sus intervenciones quirúrgicas, tratamientos y gastos de manutención durante el periodo de reposo. Por esta razón, hacen un llamado a la solidaridad para ayudar a estas tres madres que han sufrido maltratos, angustias y presiones durante años en procesos judiciales injustos y sin pruebas suficientes.