A partir de finales de Septiembre 2021 arriba a Venezuela el primer cargamento de condensado iraní con 2.1 millones de barriles (MMBbls), destinado a satisfacer procesos de producción de crudos de la FPO y apalancar procesos aguas abajo. Un condensado que antes se producía en Venezuela pero que se dejó de producir, aun contando con reservas por desarrollar de dichos crudos que rondan 2.600 MMBBls.
Cada cargamento de condensado iraní representa al barril de Octubre (WTI; ~$80.5) erogaciones adicionales por $169 millones, o una compensación equivalente a 100.000 B/D de crudo Merey, de los cuales PDVSA deja de percibir ingresos e Irán pasa a ocupar sus mercados.
Dicha compensación surge por el diferencial de precios entre la Mezcla Merey que entrega y el condensado que recibe. La cesta Venezolana promedió durante el mes de Octubre ~$67 por barril, mientras que el barril de condensado iraní se cotizaba en el entorno del WTI: $81.
Bajo la premisa que el volumen total a producir de la FPO esté en el entorno de 500.000 BPD, la necesidad de dilución neta para producir dichos crudos ronda ~185.000 BPD. En dicho caso el volumen real aportado por dichos pozos estaría en realidad alrededor de 315.000 BPD (500.000-185.000), mientras que el resto es un costoso diluyente, cuyo valor de oportunidad en el mercado es superior a la mezcla Merey-16.
Del total de diluyente manejado, 70.000 BPD (2.100.000 Bbls/mes) son importados (iraní), mientras que los 115.000 BPD restantes, son crudos livianos provenientes de Norte de Monagas.
Tanto el barril criollo liviano como el condensado importado iraní se cotizan actualmente en el entorno de ~$80.5 (@ 18/11), con un Premium promedio de ~$15 respecto a la mezcla Merey-16. A dicho diferencial habría que sumarle el descuento que PDVSA otorga regularmente a sus «compradores», como contraprestación al riesgo de hacer negocios con Venezuela debido a las sanciones, lo que constituiría un «diferencial+descuento» de cerca de 26% ($15+6=$21) por cada barril a precios de Octubre 2021, aunque en realidad, los descuentos que otorga la industria normalmente rondan los $8 hasta $12 por cada barril.
El diferencial de precios entre condensado y Merey-16 obliga a PDVSA a entregar a Irán ~3.100.000 Bbls/mes por cada 2.100.000 Bbls/mes que recibe; es decir un adicional de 1.000.000 Bbls/mes a los que adquiere.
Siendo generosos, la ganancia neta que percibiría PDVSA por la venta de esos 500.000 BPD de mezcla, equivale a un aproximado de $461.000.000, considerando un precio por barril de alrededor de $80.5 (WTI), menos el diferencial y descuento del 26% que antes señalamos, menos el costo de producción incluida dilución, de aproximadamente $29 por barril (tímido), de los cuales 23 corresponden a costos operacionales y 6 corresponden a la ganancia unitaria de sus socios en las empresas mixtas (EPM) y acuerdos de servicios de producción (ASP). Las cifras correspondientes a «ganancias unitarias» de sus socios en las Empresas Mixtas y Acuerdos de Servicios de Producción, son especulativas, ya que desconocemos los detalles al permanecer estos amparados por el velo de la oscura e inconsulta ley antibloqueo.
Pero ese mismo volumen de 185.000 BPD de diluyente empleado para sintetizar la misma producción de Merey-16, posee un valor de mercado de ~$443.000.000, considerando un barril de $80.5 para los 70.000 BPD de condensado iraní, más el valor de los 115.000 BPD de livianos provenientes de Norte de Monagas; con valor similar, aunque sustrayendo un costo de producción de $9 por barril en dicho caso. Nuestros cálculos incluyen además el costo de los 30.000 BPD (100.000 – 70.000) adicionales que PDVSA estaría obligada a devolver a Irán bajo la premisa de las mismas variables del Merey-16.
Dichos resultados sugieren que por cada 500.000 BPD-mes de crudo Merey-16 negociado por PDVSA bajo las condiciones reinantes desde finales de Septiembre’2021, Venezuela estaría operando con una ganancia marginal de alrededor de $17.600.000 por mes. Sin embargo, al barril actual que ronda los (WTI) $75.5, la perdida para el cierre de Noviembre podría rondar los ($7.050.000) por mes, y de ceder hacia los $65 (escenario probable), Venezuela estaría perdiendo ($59.000.000) por mes.
Para poder ser rentable la producción Merey-16 basada en la importación de condensado iraní, el WTI requiere superar el umbral de $75 a $76 por barril, manteniendo constantes las demás variables; descuentos, diferencial, socios y costos.
Asdrubal y Tareck exponen a Venezuela y PDVSA a perder mucho dinero. Pero nadie desde las instituciones y el estamento político parece importarle un bledo, ya que nadie cuestiona. Venezuela está dejando de ganar mucho dinero con la producción de la FPO, máxime bajo el acuerdo de suministro de condensado iraní.
A los responsables (o irresponsables) de PDVSA les parece mejor inflar artificialmente su producción a punta del reciclaje de un costoso diluyente, en operaciones cuestionables donde la improvisación y los accidentes operacionales abundan. Alimentan el maquillaje de cifras y la destrucción de nuestra industria.
Einstein Millán Arcia: Asesor Petróleo y Gas «Upstream»/Estudios de Especialización a nivel de doctorado en flujo de fluido en medios porosos – The University of Oklahoma, 1991 / Master of Science Petroleum Engineering – The University of Oklahoma, 1990 / Ingeniero de Petróleo Universidad de Oriente, 1979. Ha publicado y presentado en diversas revistas y conferencias internacionales más de 12 trabajos especializados en materia de Petróleo y Gas. Ha escrito más de 300 artículos de opinión y sido citado en materia de petróleo y gas en: spglobal.com, aporrea.org, NoticiasVenezuela.org, Plattsblog, Oilpro.com, las armas de coronel, Vanguardia de España, segurosybanca.com, The Slush Pit (Oklahoma Oil & Gas News), Energy Economist, Kaieteur-news & Stabroeknews Guyana, Sputnik-news y Los Ángeles Times.
Por: Einstein Millán Arcia
Fuente: Aporrea