En medio del enigma que aún rodea la muerte del aclamado actor Matthew Perry, las autoridades han revelado nuevos detalles sobre su patrimonio personal. Según informes judiciales citados por The U.S. Sun, Perry dejó un legado financiero que supera los $1.596.914 al momento de su fallecimiento. Este monto es independiente del «Alvy Singer Living Trust», un fideicomiso previamente establecido por el actor, que ya ascendía a más de 120 millones de dólares.
Entre los beneficiarios designados por Perry en este fideicomiso se encuentran su padre, John Perry; su madre, Suzanne Morrison; su media hermana Caitlin Morrison; y su exnovia Rachel Dunn, con quien mantuvo una relación entre 2003 y 2004.
Además de estos activos, el actor poseía una residencia valuada en aproximadamente $6 millones en Pacific Palisades, aunque esta propiedad figura a nombre de Lisa Ferguson, fiduciaria de su patrimonio, y aún no ha sido listada en el mercado. Perry también era propietario de una casa en Hollywood Hills, la cual estaba en proceso de venta por $5.195.000 poco antes de su fallecimiento. Asimismo, se sabe que alquilaba una residencia en Beverly Hills por $49.000 mensuales.
El testamento de Perry, según detalla The U.S. Sun, excluyó como beneficiarios de su fortuna a cualquier hijo que pudiera haber tenido.