El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha recibido una autorización del tribunal de apelaciones de Nueva York para pagar una fianza de menor cuantía en un caso de fraude civil. En lugar de los 464 millones de dólares iniciales, ahora deberá abonar 175 millones en un plazo de diez días mientras se resuelve la apelación.
Esta decisión representa un alivio significativo para Trump, quien junto con algunos de sus hijos y su empresa, fue multado tras ser acusado de inflar fraudulentamente el valor de sus activos. Durante semanas, el expresidente ha tratado de evitar pagar esta suma y, según sus abogados, no había logrado reunir el dinero necesario para hacer frente a la fianza.
Además, Trump ha solicitado a un panel de la corte de apelaciones que suspenda la pena mientras continúa impugnándola, aunque aún no se ha recibido respuesta por parte del tribunal. El expresidente ha reiterado que considera todo esto como una caza de brujas por parte de los demócratas.
El fallo de este lunes ha evitado, al menos por el momento, la posibilidad de que la fiscal general de Nueva York, Letitia James, intente embargar las propiedades de Trump para hacer cumplir la sentencia, lo cual habría tenido un alto valor simbólico.
«No hice nada mal y Nueva York nunca debería estar en una posición como esta otra vez. Las empresas están abandonando la ciudad, los delitos violentos están en aumento y es crucial que esto se resuelva lo antes posible», afirmó Trump a los medios.
Cabe destacar que el patrimonio neto del expresidente se estima en 3.000 millones de dólares, pero gran parte de esos activos están invertidos en bienes raíces.
Por otro lado, Trump visitó Nueva York el lunes para asistir a otra audiencia en un proceso separado relacionado con pagos irregulares a una actriz porno en 2016. El juicio, originalmente programado para el 25 de marzo, tuvo que ser reagendado.