El acuerdo entre el gobierno y la oposición de Venezuela para la creación de un fondo social ha generado altas expectativas, pero hasta el momento los beneficios no se han materializado y la información sobre el dinero es escasa.
A pesar de que el proceso ha avanzado, se han presentado retrasos debido a la falta de asistencia por parte de los representantes del gobierno. Además, en las últimas semanas no se ha podido concretar ningún encuentro con el jefe de la delegación del chavismo en los diálogos.
El líder negociador está centrado en un referendo no vinculante sobre un territorio en disputa con Guyana, dejando de lado el fondo social que se presentó como un gran logro. Aunque inicialmente se esperaba movilizar unos 3.000 millones de dólares, hasta ahora solo se ha identificado cerca de 100 millones de dólares en Europa, sin que haya ingresado ni un centavo.
La delegación opositora ha sido más activa en su llamado a acelerar el proceso, pero se reservan los detalles para cuidar la negociación.
La diplomacia de la ONU ha mantenido silencio sobre el fondo social y ha pasado casi un año sin hacer una declaración al respecto. Aunque se han mencionado los cuidados de salud y otras necesidades básicas como objetivos del fondo, no se conocen los detalles sobre su implementación.