Un migrante de Venezuela falleció trágicamente en Honduras debido a un infarto. El hombre, cuyo nombre no se ha revelado, fue llevado al Hospital Mario Catarino Rivas en San Pedro Sula, donde lamentablemente perdió la vida. Se informa que el migrante viajaba con su esposa, sus dos hijos y otro miembro de su familia, todos con la esperanza de llegar a Estados Unidos.
Honduras, conocida como un punto de tránsito para miles de migrantes de América del Sur, el Caribe, Asia y África que buscan llegar a Estados Unidos de manera irregular, ha visto un aumento en el número de migrantes que ingresan al país. Una de las nuevas rutas utilizadas es a través de Trojes y Las Manos, en el departamento de El Paraíso, fronterizo con Nicaragua.
En el municipio de Danlí, en El Paraíso, se ha registrado la llegada de más de 5.000 migrantes en algunos días, según fuentes oficiales hondureñas. Entre los migrantes, se han observado grupos familiares que oscilan entre 12 y 30 miembros, incluyendo niños.
El número de migrantes venezolanos, colombianos, cubanos y ecuatorianos que llegan a Honduras ha aumentado en los últimos meses. Esta situación refleja la difícil realidad que muchos individuos y familias enfrentan en sus países de origen, empujándolos a buscar una vida mejor en otros lugares.
La muerte de este migrante venezolano es un recordatorio de los riesgos y desafíos que enfrentan aquellos que se aventuran en este peligroso viaje en busca de mejores oportunidades. Es necesario abordar las causas fundamentales de la migración y trabajar en conjunto para encontrar soluciones que garanticen la seguridad y el bienestar de todos los migrantes.