No podemos retroceder a épocas antiguas donde la gente se movilizaba en caballos, burros y a pie
Es posible resolver el problema de la gasolina en Venezuela anexando una pimpina de este escaso recurso en la caja Clap que le llega a millones de venezolanos, y así lo propongo al Gobierno Nacional y a la Asamblea Nacional Constituyente.
La asignación de gasolina debe ser por grupo familiar que posea vehículo automotor, al menos 20 litros quincenalmente y con carácter provisional hasta lograr la normalidad permanente en el suministro del combustible a escala nacional.
Esta pimpina será a precio subsidiado para las familias de bajos recursos y a precio internacional para las que tengan mayor poder adquisitivo, todo basado en los datos que posea el Estado venezolano respecto a cada familia.
Desde el año 2020 es conocido que la patria padece semanas con bombas de gasolina cerradas por ausencia de este recurso»
La medida aquí propuesta restituirá el derecho al transporte de los ciudadanos, lo cual se encuentra menoscabado por la problemática actual asociada al bloqueo estadounidense. Esto impide la llegada de barcos con gasolina al territorio nacional, así como las fallas internas en la producción petrolera y la refinación de este producto de vital necesidad.
Desde el año 2020 es conocido que la patria padece semanas con bombas de gasolina cerradas por ausencia de este recurso. También se sabe que cuando llega el combustible, son kilométricas las colas en las estaciones con subsidio y no menos largas esas colas en las bombas de precio a medio dólar.
Mucha gente no logra equipar su automóvil y se van a casa con el tanque vacío. De igual modo, es muy costosa y peligrosa la compra de gasolina clandestina.
Lo deseable es retornar a la situación de un país con transporte adecuado al siglo XXI y no retroceder»
Siendo este el panorama y a los fines de evitar mayor daño a la economía de la nación y reducir los perjuicios múltiples contra el pueblo, que no tiene medios alternativos de transporte que sean independientes a la gasolina, resulta plenamente justificada la aplicación de la propuesta que aquí se presenta.
Como parte de este plan para solventar la crisis, es oportuno ratificar propuestas originales publicadas con anterioridad. Tales como la producción de bicicletas en toda la república para que la ciudadanía sea menos dependiente de carros que operan con gasolina.
Inclusive cabe promover los vehículos con tracción de sangre como la ley de transporte lo señala, siempre con visión de que estas soluciones son temporales. Pues lo deseable es retornar a la situación de un país con transporte adecuado al siglo XXI y no retroceder a épocas antiguas donde la gente se movilizaba mayormente en caballos, burros y a pie.
El propósito es brindarle gasolina a cada familia que lo necesite y así hacer funcionar el transporte»
En virtud del vigente estado de emergencia económica, hoy más que nunca es factible que el Estado se sirva decretar formalmente esta solución. Porque en esencia, el propósito es brindarle gasolina a cada familia que lo necesite y así hacer funcionar el transporte de un país civilizado que apunta hacia el desarrollo y la superación del bloqueo extranjero.
jesusmanuelsilva.blogspot.com
@Jesus_Silva_R
(1979) Padre. Doctor en Derecho Constitucional. Primer izquierdista elegido IVLP por USA en 2017. Abogado penalista. Profesor UCV (TSJ SC Expediente 15-1131). English teacher. Autos del libro «Memorias Políticas», UNESR 2013.