El Departamento de Justicia y el de Seguridad Nacional (DHS) han iniciado una investigación sobre las denuncias recientes que involucran órdenes del Departamento de Seguridad Pública de Texas a soldados desplegados en Eagle Pass, Texas, para empujar a inmigrantes al Río Grande, lo que ha generado preocupación y críticas hacia la administración del gobernador republicano Greg Abbott.
Con información de La Opinion
El asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, informó sobre la investigación en curso y señaló que incluso México ha expresado su preocupación sobre estas acciones, incluido el despliegue de boyas con púas en el río, calificándolo de «inhumano».
La Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos (Lulac) ha denunciado el uso de alambre de púas, boyas y otras barreras en la frontera de Texas, alegando que estas medidas ponen en peligro la seguridad de mujeres y niños que buscan asilo.
Los diarios Houston Chronicle y San Antonio Express News han informado que agentes de la Operación Estrella Solitaria, una iniciativa de seguridad fronteriza liderada por Abbott, han recibido órdenes de empujar a niños pequeños e infantes lactantes de vuelta al río Grande y de negar agua a solicitantes de asilo, incluso en condiciones de calor extremo.
Diversas organizaciones, entre ellas el Young Center for Immigrant Children’s Rights, han expresado críticas al gobierno de Abbott por su manejo de la situación en la frontera, instando al Departamento de Justicia a investigar a fondo la Operación Lone Star.
Esperamos que esta investigación arroje luz sobre los acontecimientos y se garantice el respeto de los derechos humanos de aquellos que buscan seguridad en los Estados Unidos, lo que podría impulsar un enfoque más humanitario en la gestión de fronteras en el futuro.