En caso de regresar al poder, el ex presidente estadounidense Donald Trump ha hecho una promesa audaz: liberar a las personas detenidas por su participación en el asalto al Capitolio de 2021. En un mensaje publicado en su red social Truth Social, Trump escribió: «Mi primera acción como su próximo presidente será cerrar la frontera y liberar a los rehenes del 6 de enero encarcelados injustamente». Aunque no proporcionó más detalles, esta declaración muestra su determinación de tomar medidas drásticas desde el primer día de su mandato.
Trump ya ha discutido anteriormente sus planes en caso de ser reelegido, afirmando que actuaría como dictador solo en su «primer día» en la Casa Blanca. Durante un evento de campaña en Iowa, el magnate instó al presidente demócrata Joe Biden a «liberar a los rehenes», un término que utiliza para referirse a los detenidos por su participación en el asalto al Capitolio. Este incidente, impulsado por las falsas denuncias de fraude electoral de Trump, ocurrió el 6 de enero de 2021, cuando los manifestantes irrumpieron en la sede del Congreso en un intento de detener la transferencia de poder a Biden.
Desde entonces, más de 1.358 personas han sido acusadas por su participación en el asalto, según datos del Departamento de Justicia. Alrededor de 500 personas ya han sido condenadas a penas de prisión. En cuanto a Trump, se enfrenta a cuatro procesos penales, incluidos dos por supuestamente intentar revertir los resultados de las elecciones de 2020 a su favor, que finalmente ganó Biden.
A pesar de sus desafíos legales, Trump prácticamente ha asegurado su nominación como candidato republicano para las elecciones de noviembre, después del retiro de su última rival, la ex gobernadora Nikki Haley, la semana pasada. Si bien su promesa de liberar a los detenidos por el asalto al Capitolio puede generar controversia, ciertamente muestra su determinación de mantenerse en el centro de atención política y de utilizar cualquier medio necesario para lograr sus objetivos.