Aveledo: La oposición debe admitir que el desenlace de la crisis no es ni inminente ni automático

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Una de las razones del descontento de los venezolanos con los políticos opositores tiene que ver con la falta de definición de una estrategia posible, lograble. Y también con que se transmita una sensación de ‘inminencia’ en la solución de la crisis.

Jesús Herrera / ND

Así lo opina el ex secretario general de la MUD, Ramón Guillermo Aveledo, quien agregó que los tres pasos definidos por Juan Guaidó a comienzos de 2019 (cese de la usurpación, gobierno de transición, elecciones libres) “implica cada uno procesos complejos que requieren de distintos actos, eventos y la participación de distintos actores para que se puedan producir”.

“Lo que ha cansado más a la gente es que se transmita una situación de inminencia en el desenlace cuando en realidad lo que hay que tratar de admitir es la complejidad que tiene la lucha en la que estamos y saber que es un proceso que no es automático. Que no es instantáneo. Que no obedece a una fórmula predeterminada”, aseguró Aveledo, en una entrevista exclusiva con ND.

Para Aveledo, lo que puede unir a las diferentes oposición es una estrategia «clara y convincente».

“Tiene que haber una estrategia y alrededor de ésta que se unan todos los que se puedan unir porque efectivamente hay por lo menos tres oposiciones. ¿Qué es lo que puede unir eficazmente? Una estrategia. Lo clave es una estrategia común. Uno no puede decir que hoy en día la oposición se unirá o no, eso entra en el campo de la adivinación. Lo que es importante es que una fuerza de oposición suficiente se una en torno a una estrategia clara y convincente para los propios actores”.

A continuación, nuestra entrevista

Pregunta.-Juan Guaidó ha hecho un llamado a formar un nuevo pacto unitario en la oposición. ¿Qué opina? ¿Cree que las diferencias entre las distintas oposiciones son insalvables?

Respuesta.-Lo primero es que, dada la situación que vive el país, las diferencias, por muy hondas que sean, nunca pueden ser insalvables porque ninguna diferencia es más importante que el poder atender con éxito los desafíos que la realidad nacional presenta. Ahí tiene que haber, desde luego, una gran exigencia para todos los actores. Por cierto, también para Guaidó que es el convocante. Tanto él como los convocados tienen exigencias muy grandes porque no es fácil ese entendimiento, pero tampoco la situación general del país y en particular de la oposición en este momento porque la credibilidad de su liderazgo en este momento está afectada por todo lo que ha pasado. La sociedad está muy agobiada por los distintos aspectos de la crisis que nos acosa. Nos han cambiado nuestro orden de prioridades.

-Y desde luego un asunto que también incide en la dificultad para un entendimiento es que hay dirigentes muy importantes que están aquí en el país y otros que están afuera. Y personas que, si bien no son dirigentes políticos de la misma importancia, han dado opiniones con peso, con cierta gravitación, y eso le añade complejidad al cuadro. Ese entendimiento, no ignoro su dificultad, es la obligación de los dirigentes políticos.

-Una cosa más. La unidad es un asunto clave. Siempre lo he considerado así, pero tiene que ser unidad en torno a un propósito común y allí siempre hay dificultades para alcanzarlo.

-Normalmente, las estrategias no se revelan completamente, como es razonable, y más en una situación como la venezolana, donde ya el poder tiene suficiente ventaja para que le agreguemos la ventaja adicional de un juego destapado por parte de sus adversarios.

-La estrategia, sin duda alguna, no solo debe incluir una opción de acción con relación a la convocatoria del 6D, que tiene todas las irregularidades que sabemos, sino ver más allá. Ver al 6D, buscando lo que se aspira, que no es una respuesta al 6D, sino un cambio político en el país.

P.-De acuerdo a Guaidó, el pacto es para hacerle frente a lo que llama farsa electoral del 6D. Sin embargo, para Henrique Capriles la elección puede convertirse en un hecho movilizador. ¿Cuál es su postura? ¿Debe la oposición participar y aprovechar el evento para denunciar las condiciones? ¿O debe abstenerse?

R.- La elección del 6D como eventualidad movilizadora no debe ser vista solamente en términos de abstenerse o votar, porque la capacidad movilizadora de cualquier hecho político depende de cómo actúen los actores políticos ante ese hecho.

– Puede haber un rechazo a esa convocatoria pero la abstención por sí sola no basta. Puede haber impugnación, rechazo, participando hasta el final. También exigiendo modificaciones, mejoras en las condiciones, exigiendo respeto a derechos y libertades.

– En política nunca puede pensarse como un contrato de adhesión. TEl acuerdo unitario en la oposición no puede ser una imposición unilateral sino producto del entendimiento entre todos los actores y lo mismo que la acción con relación a las elecciones tampoco sea un contrato de adhesión, en el sentido de, como el poder pretende, “si tú quieres participar aquí, es así como yo te digo”; cuando ha habido tan graves alteraciones de la ley.

-Siempre hay que ver la política como un asunto en el cual no es un solo actor el que impone las condiciones. La realidad es mucho más compleja y cada actor tiene su manera de influir e incidir en la formulación de esas condiciones.

P.- En la oposición también se encuentran personalidades y partidos como los de Henri Falcón, Claudio Fermín, Enrique Ochoa Antich, Timoteo Zambrano, entre otros. En este escenario en el que la oposición se encuentra dividida en tres toletes, ¿cómo ver la luz al final del túnel? Es más, ¿es la unidad el objetivo mayor o es el objetivo encontrar una estrategia que funcione y que acompañe el que quiera?

R.- La respuesta es que tiene que haber una estrategia y alrededor de ésta que se unan todos los que se puedan unir porque efectivamente hay por lo menos tres oposiciones.

-¿Qué es lo que puede unir eficazmente? Una estrategia. Lo clave es una estrategia común. Uno no puede decir que hoy en día la oposición se unirá o no. Eso entra en el campo de la adivinación. Lo que es importante es que una fuerza de oposición suficiente se una en torno a una estrategia clara y convincente para los propios actores.

-Tal es así que está el propio Guaidó llamando a los dirigentes para buscar ese entendimiento.

P.- A la par del pacto unitario, movimientos como Vente Venezuela y ORDEN formaron la llamada ‘Coalición Anti-Izquierda’ y se oponen tanto a Nicolás Maduro como a Guaidó. ¿Qué piensa de ellos? ¿Son una alternativa?

R.- Yo soy demócrata y estoy a favor de la democracia y la economía social de mercado, que tenga sensibilidad por los más débiles. Esa es mi formación. Mis definiciones son por algo, no contra algo. Siempre la definición que cautiva a la gente, que hace que alguien se sienta atraído por una política, es lo que la gente es.

– A nadie le recomiendo que se defina como anti-algo, sino como pro-algo. Eso es lo que realmente define.

“El liderazgo vive ahorita su peor momento”

Esta semana, el presidente de Datanálisis, Luis Vicente León, reveló en una entrevista que la aceptación de Juan Guaidó y de la oposición que él dirige está sobre el 17% y la de Nicolás Maduro por sobre el 13%.

Esta encuesta, para Aveledo, “muestra que así como hay un rechazo muy grande a las políticas del gobierno y una enorme impopularidad por parte de los actores del poder; también ha habido una merma en la popularidad en los actores de la oposición misma”.

A su juicio, “el liderazgo vive ahorita su peor momento y claro. Ese deterioro no solo afecta a Guaidó y a los dirigentes de los principales partidos. También afecta a otras voces de la oposición porque están afectados por el desgaste y por el hecho de que se transcurre el tiempo y no hay cambio”.

Indicó que los tres pasos a los que se refirió Guaidó a inicios del año pasado -cese de la usurpación, gobierno de transición, elecciones libres-, cada uno de ellos “implica procesos complejos que requieren de distintos actos, eventos y la participación de distintos actores para que se puedan producir”.

Y remarcó: “No hay soluciones fáciles y es algo que responsablemente tenemos todos que decir”.

¿Hay desesperanza?

Consultado sobre si esa baja aceptación se podría interpretar como desesperanza en el pueblo, Aveledo precisó que la esperanza “tiene que ver con objetivos que, por más que sean difíciles, sean posibles. Y en la confianza que genere el llamado a la búsqueda de esos objetivos”.

“Por eso es muy importante que a todas estas convocatorias estén aderezadas e incluyan una visión de qué ha pasado que no se ha podido lograr el objetivo, de manera que haya una corrección en las políticas”, sugirió.

“Si hubiéramos estado siempre haciendo lo correcto, por un lado seríamos infalibles, cosa que no ocurre. Ahora, si uno no se ha equivocado nunca y no se han alcanzado los objetivos, se está yendo a una dirección contraria a lo que se propuso. La infalibilidad tiene sus riegos. Por eso nunca podemos presumir que somos infalibles. No es una buena noticia lo que nos dicen las encuestas”, apuntó.

Recomponer la oposición

P.- En su momento, usted, al frente de la MUD, dirigió la derrota más grande que haya registrado el chavismo en 21 años. Para muchos, es ejemplo a seguir. ¿Estaría dispuesto a ayudar a recomponer a la oposición?

R.- Cada momento tiene sus condiciones y sus circunstancias y protagonistas. A mí me parece particularmente adecuada la escogencia que hicieron del doctor Gerardo Blyde.

-Yo agradezco siempre, por supuesto, cuando hay reconocimientos a lo que uno pudo hacer; y lo mismo cuando estuvo Chúo Torrealba, y cualquier experimento posterior. Lo que es clave es la voluntad de los actores de estar unidos. Si los actores no quieren estar unidos, es muy difícil porque nadie es mago.

-Tiene que haber esa base sincera. No es que es ajena a intereses. Eso es mentira de que los intereses no existen. Eso siempre existe. La cosa es poner por encima el interés general.

-Lo primero es que yo soy fanático de la pelota y yo no le hago swing a lanzamientos que no me han hecho. Y eso no se hace desde la tribuna. Eso se hace desde el montículo. Yo creo en el viejo dicho castellano de que segundas partes nunca fueron buenas. Eso también es un dato. Y siempre me defino como militante de base de la unidad. Yo creo en la unidad y lo que pueda hacer para ayudar siempre lo haré desde esa posición de un venezolano demócrata que cree que solo uniéndose el liderazgo alrededor de una estrategia realizable, es posible avanzar en una situación que cada vez es más deficiente.

“La solución vendrá de la mano de nosotros”

Aveledo envió un mensaje a los venezolanos que piden a gritos un cambio en la política para superar la grave crisis que atraviesa el país. Dijo que la solución vendrá, y vendrá “de la mano de nosotros los venezolanos”.

“Seremos nosotros los venezolanos los que daremos esa solución. No solo el liderazgo, que tendrá un papel importante; pero será toda la sociedad. Vamos a necesitar ayuda de la comunidad internacional, pero la responsabilidad principal siempre será de nosotros, los ciudadanos de este país. Somos corresponsables de la solución a esta gravísima crisis que tenemos”.