A pesar de la prohibición constitucional, el presidente Nayib Bukele está buscando un nuevo mandato de cinco años en las elecciones del 4 de febrero de 2024.
El jueves, el presidente de El Salvador, Nayib Bukele, obtuvo una licencia del Congreso para dejar formalmente su cargo durante los últimos seis meses de su gobierno y dedicarse a la campaña para su reelección.
A pesar de lo establecido en la Constitución, Bukele busca un segundo mandato de cinco años en las elecciones del 4 de febrero. La cámara aprobó su solicitud con 67 votos a favor y 12 en contra. Cinco diputados se ausentaron de la votación.
El vicepresidente, Félix Ulloa, también presentó una solicitud similar y recibió la aprobación del Congreso como compañero de fórmula de Bukele en la misma votación.
A pesar de la prohibición establecida en la Constitución, la Corte Suprema de Justicia determinó en 2021 que Bukele sí puede participar en las elecciones por segunda vez y que será el pueblo quien tome la decisión.
Bukele solicitó al Congreso que nombrara a Claudia Juana Rodríguez de Guevara como su reemplazo durante el período comprendido entre el 1 de diciembre y el 30 de mayo de 2024, cuando concluye su mandato presidencial actual. Esta petición fue respaldada por el pleno.
Rodríguez de Guevara, licenciada en Administración de Empresas, es una persona de confianza del presidente y también se desempeña como presidenta de la junta directiva de la Dirección Nacional de Obras Municipales (DOM), donde es la representante legal. Además, ocupa el cargo de secretaria del consejo de ministros.
Antes de convertirse en presidente en 2019, Bukele inició su carrera política en la alcaldía de Nuevo Cuscatlán (2012-2015) antes de dar el salto a la alcaldía de la capital, San Salvador, de 2015 a 2018.
Abogados constitucionalistas sostienen que su participación en las elecciones viola al menos cuatro artículos de la Constitución, incluido el artículo 154, que establece que «el período presidencial será de cinco años y comenzará y terminará el 1 de junio, sin que la persona que haya ejercido la Presidencia pueda continuar en sus funciones un día más».
A pesar de esto, el Tribunal Supremo Electoral avaló a principios de noviembre la candidatura de Bukele al considerar que cumple con «los requisitos legales».
Las resoluciones de la Corte Suprema y la confirmación del Tribunal Supremo Electoral han sido criticadas por abogados, partidos políticos y organizaciones de la sociedad civil, que alegan que la sala judicial que lo habilitó fue elegida por el Congreso, el cual está controlado por Nuevas Ideas, el partido de Bukele, violando así el procedimiento establecido por la Constitución.
El presidente salvadoreño, que goza de una alta popularidad, se inscribió el 27 de octubre pasado. Según las encuestas más recientes, el 70,8% de la población aprueba su gestión y el 97,7% cree que la violencia ha disminuido.
En segundo lugar se encuentran otros candidatos a la presidencia, muy por detrás de Bukele: Joel Sánchez, candidato de la derechista Alianza Republicana Nacionalista (Arena), con un 4,3%, y Manuel Flores, del izquierdista Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional, con un 2,8%.
Arena gobernó el país durante 20 años, de 1999 a 2009, mientras que el FMLN lo hizo durante otros diez años, de 2009 a 2019, hasta que Bukele arrasó en la primera vuelta de las elecciones presidenciales.