El político David Smolansky denunció que el régimen de Nicolás Maduro está negando el derecho al voto a aproximadamente 4.5 millones de migrantes venezolanos en las próximas elecciones presidenciales.
Smolansky, excomisionado de la Organización de Estados Americanos para la Crisis de Migrantes y Refugiados Venezolanos, expresó en su cuenta de Twitter que esta situación constituye una violación a la participación e identidad de los ciudadanos.
Comparó la cantidad de migrantes afectados con la población electoral de los estados de Zulia y Miranda, resaltando la magnitud del problema.
Además de las dificultades para inscribirse en el Registro Electoral en el exterior, el gobierno de Maduro ha impuesto más obstáculos para dificultar la participación de los venezolanos. Por ejemplo, en España, las autoridades consulares exigen un permiso permanente para inscribirse, lo cual impide a aquellos con permisos temporales ejercer su derecho al voto.
Asimismo, aquellos con pasaportes vencidos pueden registrarse, pero deben renovar su pasaporte, lo que implica un costo de 216 dólares. Estas medidas discriminatorias evidencian el apartheid que el régimen está aplicando a los migrantes venezolanos.