El privado Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF) estima que la economía de Venezuela sufrió una contracción del 7% durante el primer semestre de 2023 en comparación con el mismo período del año anterior, marcando un nuevo ciclo recesivo en el país.
Con información de Infobae
Este declive económico se caracteriza por dos trimestres consecutivos de contracción, un 7,6% en el primer trimestre y un 6,3% en el segundo, según la información divulgada por el OVF.
Después de ocho años de recesión, Venezuela experimentó un crecimiento en 2022 impulsado por la flexibilización de controles económicos y la dolarización informal. Sin embargo, expertos ya habían advertido de una desaceleración del crecimiento desde finales del año pasado.
Factores como los bajos salarios, particularmente en el sector público, y la falta de crédito que prácticamente paraliza la economía, se destacan como causantes de esta contracción, según el OVF. La principal gremial de comercio y servicios, Consecomercio, también alertó sobre la caída del consumo en el país.
La producción de petróleo, una industria vital para Venezuela, ha experimentado una dramática disminución, pasando de más de 3,2 millones de barriles diarios hace dos décadas a alrededor de 800.000 barriles diarios en la actualidad. El régimen de Nicolás Maduro atribuye esta situación a las sanciones financieras lideradas por Estados Unidos, mientras que especialistas señalan que la caída se debe a la falta de inversión y la corrupción en el país.
El ex diputado y miembro del observatorio, Ángel Alvarado, advierte que la economía venezolana ha vuelto al comportamiento de decrecimiento que mostró desde 2013 hasta hace dos años, principalmente debido a la caída del consumo, el crédito y el gasto público.