Educadores marcharon en Miranda: «¿Quién puede comprar comida con salarios de hambre?»

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Lucía gana 464 bolívares mensuales. Ella es docente tipo 3. Trabaja en una escuela de los Valles del Tuy, estado Miranda. Aunque es profesional, el sueldo que percibe apenas le alcanza para pagar el transporte hacia la institución; recargar su teléfono y comprar un cartón de huevos.

El Pitazo

Esta educadora fue una de las que participó en la marcha realizada este 9 de enero en Ocumare del Tuy, así como en otras ciudades del estado Miranda, para exigir mejoras salariales y sociales al Gobierno.

«Me tengo que rebuscar vendiendo ropa, porque, de lo contrario, moriría de hambre. Nuestros salarios se han pulverizado con la inflación. Lo que ganamos es realmente una burla», indicó Lucía.

La situación de Dinorah es más crítica. Ella es docente tipo 1. Gana Bs. 250 y en pasaje gasta lo mismo al mes, a razón de 10 bolívares diarios, ida y vuelta. «¿ Cómo se trabaja en esas condiciones? ¿Quién puede comprar comida con estos salarios de hambre?», se preguntó.

Previo a la manifestación los educadores se concentraron en la plaza del Estudiante de Ocumare, con pancartas donde se leía » no existe calidad educativa con docentes mal pagados», entre otras denuncias. La representante sindical, Mary Infante, indicó que el salario del trabajador público está devaluado y llamó a los docentes a organizarse y formar los comités de conflicto en cada institución.

Recordó que están exigiendo la firma de la contratación colectiva; el pago del 280% de la deuda con sus incidencias, de las primas y las evaluaciones al personal administrativo y obrero, así como la eliminacion de la Oficina Nacional de Presupuesto (Onapre) por considerar que ha mutilado los beneficios de los trabajadores.

«No nos quitarán el derecho a protestar» y «los pollitos dicen pío, pío, pío y los maestros dicen págame lo mío», fueron parte de las consignas que se escucharon durante la toma de calle. Los asistentes coincidieron en que se mantendrán en la lucha hasta que el patrono escuche sus peticiones.