Grecia se enfrenta a una situación alarmante con un total de 122 incendios activos, de los cuales 75 se han producido en las últimas 24 horas. Los tres principales focos han vuelto a arder y se han llevado a cabo evacuaciones en municipios de la región de Evros. La Protección Civil ha instado a los residentes de Atarni y Plaka a dirigirse hacia la ciudad de Alejandrópolis.
Desde el pasado sábado, se han quemado más de 73.000 hectáreas en la región de Evros, incluyendo 13.000 en el Parque Nacional de Dadia, donde el año pasado se perdieron otras 5.000 hectáreas debido a incendios. También han surgido nuevos focos en Parnitha, una zona natural al norte de Atenas. Aunque la situación parecía estar bajo control en estas dos regiones al inicio del día, esta mañana se han desatado seis incendios casi simultáneamente en el suroeste de Atenas debido a una tormenta de rayos. Además, un incendio provocado por un rayo ha estallado en la isla de Andros, en el archipiélago de las Cícladas.
El pronóstico para mañana domingo indica que el riesgo de incendio sigue siendo alto en muchas partes del país y el cuerpo de bomberos se mantiene en alerta máxima. Los incendios de este verano en Grecia se consideran los peores en Europa desde que se tienen registros, según informes de la Unión Europea. Hasta ahora, se estima que se ha quemado el equivalente al 1,09% de la superficie de Grecia en lo que va del año, un porcentaje significativamente mayor que el promedio del 0,33% registrado entre 2006 y 2022.
Lamentablemente, los incendios han cobrado la vida de al menos 21 personas desde el pasado sábado, incluidos 18 inmigrantes irregulares que fueron encontrados carbonizados en Dadia. La situación es grave y las autoridades están trabajando arduamente para controlar los incendios y garantizar la seguridad de los residentes afectados.