Kati Fernandes: la venezolana que pone su toque con la percusión en la gira de Karol G

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Kati Fernandes, una talentosa percusionista venezolana de 38 años, se ha convertido en un miembro destacado de la banda que acompaña a la cantante Karol G en su exitosa gira «Mañana será bonito». Su colaboración con la estrella colombiana comenzó en 2021, cuando fue contactada por el director musical Rob Trujillo para participar en un especial de fin de año. Desde entonces, han compartido escenario en el prestigioso festival de Coachella y han recorrido 15 estadios en Estados Unidos. Ahora se preparan para llevar su espectáculo a Latinoamérica a finales de este año.

La experiencia de Kati Fernandes en la gira ha sido increíble. Se ha enfrentado a multitudes de hasta 70.000 personas en cada concierto y ha sido testigo de la grandeza y la producción masiva del espectáculo. Además, forma parte de una banda conformada exclusivamente por mujeres, en línea con el mensaje de empoderamiento femenino que Karol G busca transmitir. Fernandes describe a la cantante como humilde y comprometida tanto con el proceso de producción como con su equipo. A pesar de las diferencias culturales, la relación entre las integrantes de la banda es excelente.

Uno de los momentos más emocionantes para la percusionista venezolana será el concierto en su país natal. Después de 10 años sin visitarlo, regresará junto a una artista de renombre mundial como Karol G. Esta oportunidad es un logro significativo para Fernandes, quien se siente orgullosa de representar a su país en la industria musical profesional.

El camino de Kati Fernandes hacia el éxito no ha sido fácil. Desde una edad temprana, se dedicó a la música y se especializó en percusión, aunque admitió que esta elección fue en gran parte fortuita. Comenzó su formación en el Conservatorio de Música Lino Gallardo en Caracas y continuó estudiando en la Casa de la Cultura de Chacao. A lo largo de su carrera, ha tenido la oportunidad de tocar con reconocidos artistas venezolanos como Ricardo Montaner, La Big Band de Andy Durán y Jeremías, entre otros.

La migración también ha sido un tema importante en la vida de Fernandes, ya que sus padres son migrantes. Decidió emigrar a Estados Unidos en 2013 debido a diversas razones, incluyendo el tratamiento médico de su madre y la situación económica en Venezuela. Aunque enfrentó desafíos al establecerse en Miami, finalmente encontró su lugar en la industria musical, trabajando con bandas como Fondo Blanco y Juniors Band.

A pesar de sus logros actuales, Kati Fernandes tiene grandes sueños para el futuro. Sueña con convertirse en la próxima Sheila E, una reconocida percusionista internacional, y le encantaría colaborar con artistas estadounidenses. También tiene como objetivo crear una comunidad de mujeres percusionistas que se apoyen mutuamente y promuevan una mayor representación en el medio.

Mientras trabaja para alcanzar sus metas, Fernandes espera con ansias su concierto en Venezuela en marzo. Está decidida a ofrecer un espectáculo del que su país pueda estar orgulloso. Su historia es un ejemplo inspirador de perseverancia y dedicación en el mundo de la música.