El diplomático español Jesús Silva, quien fue el anterior embajador de España en Caracas, señaló varios aspectos que diferencian a este proceso de los anteriores
Por El Nacional
Este agosto comenzó con la noticia de una quinta ronda de negociaciones desde que en el año 2015 el chavismo resultara derrotado en las elecciones parlamentarias. El diplomático español Jesús Silva, quien fue el anterior embajador de España en Caracas, señaló que esta oportunidad podría ser diferente por varios factores nuevos.
«En primer lugar, el alto grado de compromiso de importantes países de la comunidad internacional en esta iniciativa, lo que hará más difícil un ardid», señaló en una columna de opinión de El Mundo.
Silva reconoció que el decidido apoyo del nuevo gobierno de Estados Unidos a este proceso es una novedad, así como las que calificó de indisimuladas ansias de Maduro de entenderse con la Administración Biden.
Asimismo, el hecho de que Rusia haya aceptado por vez primera involucrarse directamente y sentarse a la mesa. «Países Bajos será otro testigo directo, en calidad de acompañante, y junto a Rusia deberá dar testimonio de la buena fe negociadora de las partes (descorazonador que no sea España)», expresó.
El diplomático destacó el valor y el reconocimiento del gobierno interino internacionalmente. «Para Juan Guaidó y los sectores opositores que le apoyan, agrupados en la nueva Plataforma Unitaria, es un gran logro haber conseguido condenar a la irrelevancia las artimañas negociadoras paralelas del régimen y protagonizar la mesa como la verdadera oposición que reconoce el mundo, a pesar de los persistentes intentos de intentar debilitarla, ignorarla o dividirla. Queda claro que sin Guaidó y su grupo no es posible un verdadero acuerdo, incluyendo el levantamiento de sanciones», remarcó.
De la misma manera, aplaudió el trabajo de la comunidad internacional. «El caso venezolano demuestra que la aldea global funciona, que la diplomacia sirve para algo, que las presiones internacionales son útiles y que las sanciones pueden ser eficaces. Guaidó y su grupo tienen en el apoyo exterior su principal baza frente al régimen y una carta para intentar conseguir concesiones», indicó.
«Al menos este intento permitirá comprobar hasta qué punto Venezuela tiene solución y si puede protagonizar una historia de éxito hacia una transición pacífica y acordada como lo hizo España en los años 70, dando lugar a los mejores años de nuestra historia como país. Buena suerte y altura de miras», concluyó.