El senador estadounidense por Florida, Rick Scott, ha dejado claro que Estados Unidos no levantará las sanciones al gobierno de Nicolás Maduro hasta que se realicen elecciones presidenciales libres y justas en Venezuela, y se permita la participación de María Corina Machado como candidata. En una entrevista con el medio NTN24, Scott afirmó que su país no debería reducir las sanciones al chavismo y actuar como si tuviera relaciones legítimas con Maduro, ya que no hay confianza en el régimen.
El senador criticó la idea de la administración de Joe Biden de reducir las sanciones, argumentando que esto no garantizará elecciones democráticas en Venezuela. Destacó que María Corina Machado ganó las primarias con más de 2 millones de votos y afirmó que se necesita un presidente en Estados Unidos que trabaje para reunir a la comunidad internacional y exija una elección verdadera, sin importar quién resulte ganador.
Scott expresó su desacuerdo con las decisiones de la administración de Biden, afirmando que están complaciendo a dictadores de todo el mundo al reducir las sanciones a Maduro. Hizo hincapié en la importancia de defender la lucha por las libertades y mencionó los casos de Cuba y Nicaragua.
El senador destacó que el Tribunal Supremo de Justicia no permite que María Corina Machado sea candidata y considera que la negociación de Biden con el régimen no está funcionando. Recordó que, si no hay elecciones libres y justas, se habrá perdido.
A mediados de octubre, el gobierno de Biden levantó parcial y temporalmente las sanciones al régimen de Maduro, incluyendo las del sector petrolero, después de que la oposición democrática y el chavismo acordaran algunas cláusulas para un proceso electoral democrático en Barbados. Sin embargo, al régimen socialista le quedan poco más de 10 días para cumplir totalmente los compromisos o el Departamento del Tesoro de Estados Unidos estará preparado para modificar o revocar las autorizaciones.
La administración también anunció recientemente otras flexibilizaciones, como autorizaciones para transacciones con Petróleos de Venezuela y algunas actividades de Conviasa. Sin embargo, estas autorizaciones estarán limitadas a la repatriación de venezolanos desde jurisdicciones estadounidenses.