El Tribunal Supremo de Justicia (TSJ) en el exilio, designado por la Asamblea Nacional elegida en 2015, emitió un comunicado en el que alerta a la comunidad internacional sobre las denuncias de tortura presentadas por el estudiante John Álvarez durante una audiencia. Según el comunicado, el TSJ legítimo de Venezuela tiene la responsabilidad de preservar la supremacía de las normas y principios constitucionales, así como la defensa de los derechos humanos.
En el comunicado, el TSJ en el exilio expresa su preocupación por las torturas y tratos crueles e inhumanos que sufren los presos políticos en Venezuela. Además, menciona las denuncias de John Álvarez, quien afirmó haber sido sometido a torturas con el objetivo de implicar a sindicalistas detenidos y condenados por luchar por los derechos laborales de sus afiliados.
El TSJ en el exilio enfatiza su rechazo a cualquier forma de tortura o trato cruel, inhumano y degradante. Asegura que estos actos son llevados a cabo de manera sistemática y como política del régimen de Nicolás Maduro Moros, con el fin de obtener confesiones o declaraciones bajo coacción, violando así la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
Además, el organismo condena la tortura directa e indirecta, así como el sufrimiento infligido a los familiares de los detenidos. También menciona la negación de atención médica adecuada, las amenazas y la falta de condiciones mínimas en los lugares de reclusión.
El TSJ en el exilio ha decidido denunciar ante la Fiscalía de la Corte Penal Internacional (CPI) las acciones de los miembros del Poder Judicial, el Ministerio Público, la Defensoría del Pueblo y los órganos policiales y militares en Venezuela, por la comisión de crímenes de lesa humanidad. En particular, se presentará la denuncia de John Álvarez, ya que los actos a los que fue sometido violan diversos instrumentos internacionales de protección de los derechos humanos.
Puedes acceder al comunicado completo aquí: [Enlace al comunicado contra la tortura]