El Gobierno de Venezuela ha rechazado el jueves la «vergonzosa injerencia» de la Commonwealth en sus asuntos internos. La Commonwealth había expresado su «profunda preocupación» por el referendo que se celebrará en Venezuela el 3 de diciembre sobre la disputa con Guyana por un territorio de casi 160.000 kilómetros cuadrados.
En un comunicado, el Gobierno venezolano ha señalado que las declaraciones de la secretaria general de la Commonwealth, Patricia Scotland, tienen como objetivo «contribuir a las pretensiones» de Guyana de «promover un proceso de desestabilización en la región caribeña». Además, considera una «demostración de mala fe» la afirmación de la Commonwealth de que las elecciones presidenciales venezolanas se realizarían un mes después del referendo, acusando a Scotland de mentir.
El Gobierno de Venezuela ha recordado a la Commonwealth que es un país soberano con una democracia sólida, y que las convocatorias a consultas populares sobre temas de especial interés nacional son atribuciones de la Asamblea Nacional. Por lo tanto, considera inaceptable que dicha organización cuestione estas decisiones de carácter soberano.
Venezuela reitera que la única vía para abordar la disputa con Guyana es a través del Acuerdo de Ginebra, firmado en 1966 entre Venezuela y el Reino Unido. Según este acuerdo, la solución debe ser acordada de manera práctica y mutuamente satisfactoria para ambas partes.
El referendo en Venezuela se llevará a cabo el 3 de diciembre y más de 20 millones de ciudadanos podrán participar en él. La consulta preguntará si están de acuerdo o no con la creación de una región para anexionarse el Esequibo. La campaña para el referendo comenzará el 6 de noviembre y finalizará dos días antes de la consulta.
Por su parte, Guyana ha buscado protección urgente de la Corte Internacional de Justicia en respuesta al supuesto plan de Venezuela para apoderarse del territorio guyanés. La CIJ declaró tener jurisdicción para pronunciarse sobre esta disputa a principios de este año.