En la actualidad, Venezuela se apoya en dos modelos económicos que desempeñan un papel fundamental en la configuración del perfil de desarrollo del país, según afirmaciones de Vicente Brito, presidente de la Red por la Defensa del Trabajo, la Propiedad y la Constitución.
Con información de El Impulso
Uno de estos modelos se basa en la explotación de las riquezas naturales, como el petróleo, oro, hierro, aluminio, cemento, carbón, sílice, petroquímica y más, manteniendo más del 80% de la actividad productiva en manos del Estado. Esto permite que el Estado sea dueño de casi el 90% del patrimonio empresarial nacional.
El otro modelo económico está representado por el sector privado, que se centra en la comercialización de productos, tanto importados como nacionales. A pesar de la complejidad económica, el sector privado sigue siendo un pilar importante en Venezuela, con más de 300,000 empresas formales activas.
Este equilibrio entre el sector público y privado en la economía venezolana plantea desafíos y oportunidades. Mientras el Estado controla la explotación de recursos naturales, el sector privado desempeña un papel vital en la comercialización y distribución de productos. En medio de esta compleja dinámica, la colaboración y el entendimiento entre ambos sectores son esenciales para el desarrollo sostenible del país.